...en qué coño se debió fumar el autor esa noche. No tengo mucho más que decir... oh, sí, qué sentimiento le pone el hombre...
Bueno, y como le veo preocupado al chaval con esta duda existencial, voy a hacerle el favor de responder:
Ahora bien, cómo se escribe eso en una onomatopeya es otra historia. Qué sonido más ridículo para un animal tan hermoso... desde luego, menudo desperdicio.
PD: Esta entrada no habría sido posible sin el blog de Tompcat. Un saludo =D